Mundo Startup

Cuando queremos conocer la opinión que el público tiene de nuestra marca en el mundo digital, la reputación online es la medida clave. Actualidad, relevancia, credibilidad, seguridad, respeto, transparencia, honestidad… son valores que determinan esa reputación. El problema está en que, en el universo digital, muchas veces esa reputación no depende de lo que hagamos o digamos, sino de lo que digan de nosotros. Una empresa, o una persona, pueden sufrir fugas de información, suplantaciones de identidad, publicaciones de informaciones negativas… que pueden dañar gravemente su reputación.

El impacto de tener una mala reputación digital es incalculable. Según el abogado especialista en reputación online, CEO y cofundador de RepScan, Josep Coll, que participó en la sesión sobre “Actuaciones y soluciones ante una crisis de reputación online”, celebrado por AUSAPE el 2 de junio, a día de hoy “la moneda global es la reputación online”. Esto se aplica tanto a personas como a empresas e instituciones. Una noticia negativa puede provocar la pérdida de inversiones por valor de millones de euros, e incluso las informaciones publicadas sobre el fracaso de un proyecto conducen a veces a serias dificultades para emprender nuevos negocios. “Un solo contenido puede destrozar tu vida”, sentenció Coll, quien denunció la facilidad con la que se difunden contenidos falsos u ofensivos impunemente.

El objeto de esta sesión sobre “Actuaciones y soluciones ante una crisis de reputación online” fue precisamente dar claves para defenderse de estos ataques. Además de Coll, intervinieron David Escamilla, comunicador y consultor de comunicación estratégica, y Nacho Santillana, director de Sistemas de Información del Ayuntamiento de Barcelona y coordinador del Grupo de Trabajo de Innovación de AUSAPE, que preparó la sesión.

Los riesgos de la sobrexposición en redes

Un riesgo evidente para la reputación online es la sobreexposición, sobre todo en redes sociales. Josep Coll recordó algo que muchas veces se olvida: que “las redes sociales son un arma profesional”. Por eso, es recomendable prescindir de publicaciones que puedan generar polémica, como las relacionadas con política, fútbol, religión… y compartir más contenidos que aporten valor a nuestra imagen profesional. “Cuando vas a hacer negocios con una persona o empresa, cada vez va a ser más necesario contar con una buena reputación online”, aseveró. David Escamilla, por su parte, recomendó saber separar lo que exhibimos en público y lo que debemos guardar para el ámbito privado.

Cómo luchar contra una crisis de reputación online

Para luchar contra una crisis de reputación online, es importante ser proactivo. Según afirmó Coll, construirse activamente una buena reputación digital permite estar preparado para cuando aparezcan informaciones negativas. “El partido de las ventas se juega en la reputación online”, afirmó.

Coll resumió en el derecho a la propia imagen, al olvido y a no ver suplantada su identidad los principales derechos de las personas en la Red. Para las empresas, destacó el derecho a la integridad de la marca, que incluye la reputación online, el derecho a que la información que se publique sobre ella sea veraz y el derecho a posicionar online el contenido que quieran que la gente vea. Escamilla abogó por que el mundo digital vaya asemejándose al mundo físico, donde la difamación tiene consecuencias.

Hablando de su startup, RepScan, que permite a las personas y las empresas controlar su reputación online, Coll valoró que, gracias a la tecnología, han podido democratizar el acceso a servicios de reputación online, que antes estaban reservados para una élite. Para ello, RepScan se centra en cuatro acciones: detectar contenidos negativos, documentarlos, eliminarlos, e inyectar contenido positivo veraz y posicionarlo en buscadores. Entre los problemas más habituales para sus clientes, Coll mencionó las noticias falsas y los procesos judiciales publicados en los medios de comunicación.

La sesión sobre Reputación Online organizada por el Grupo de Trabajo de Innovación de AUSAPE continúa la línea de la asociación de ofrecer contenidos relacionados con temas no estrictamente tecnológicos. Su objetivo es ayudar a sus asociados a desarrollar nuevas formas de enfrentarse a los desafíos multidimensionales que encaran hoy día las organizaciones.