Carlos M. Lizán, CEO de INLEA Legal: “La situación en otros países para las startups es mucho más sencilla”

Con el objetivo de impulsar el ecosistema emprendedor español en Estados Unidos, el grupo INLEA pone en marcha su propio despacho de abogados, INLEA LEGAL, apostando por la innovación a la hora de prestar servicios jurídicos a empresas tecnológicas con la ayuda y experiencia de sus otras verticales: negocio, tecnología y recursos humanos.

Bajo el nuevo concepto de Legal-Tech-Business, INLEA LEGAL tiene el objetivo de brindar servicios legales a empresas emergentes e innovadoras. Para ello, se constituye como un despacho de abogados que, a la hora de satisfacer las necesidades del ecosistema innovador lo hace con el apoyo y experiencia del resto de verticales de la multinacional INLEA: negocios, tecnología y recursos humanos.

El hecho de ser una empresa nacida en Silicon Valley que ahora desembarca en España es un factor diferencial de INLEA LEGAL, en palabras de su CEO, Carlos M. Lizán, ya que permite a INLEA LEGAL trabajar directamente con socios internacionales que conocen muy bien uno de los principales lugares para la internacionalización de las startups: Estados Unidos. Lizán añade: “Que nuestro origen sea Silicon Valley también nos da una ventaja a la hora de poder aplicar tecnologías muy innovadoras y de contactar y contratar talento que ayude a nuestros clientes. Sabemos bien lo que las multinacionales y los inversores buscan en España y en sus startups y cómo seducirles”.

Además de por el propio Carlos M. Lizán, como Socio y Consejero Delegado, INLEA LEGAL está liderado por Flavio A. Soares, Presidente y Responsable del Departamento TIC e Internacional y Josep R. Novell, Socio y Responsable del Departamento Corporativo y Comercial.

Hablamos con su CEO sobre este proyecto y sobre las posibilidades de las startups españolas en el extranjero.

¿Cómo nace Inlea Legal?

INLEA LEGAL es la unión de dos firmas de abogados de Barcelona especializadas en Venture Capital/M&A y en propiedad intelectual e industrial con el paraguas de la corporación estadounidense Inlea.

De esta manera nació INLEA LEGAL, con el espíritu de ofrecer un servicio 360º de derecho mercantil, societario y de propiedad intelectual, acompañado por el equipo de ingenieros, recursos humanos y de negocio de Inlea, lo que hace de INLEA LEGAL un “one stop shop” para servicios legales, de negocio y financieros.

¿Qué podéis ofrecer a las startups que inician su andadura que no puedan ofrecer otros despachos de abogados?

INLEA LEGAL es una firma legal-tech-business internacional que da apoyo global a sus clientes. La unión de abogados expertos en M&A, IP y derecho mercantil, junto con el apoyo de un equipo de ingenieros, da como resultado un asesoramiento que provee no solo la parte legal, sino una visión de cómo afrontar el negocio, cómo escalar y cómo hacer realidad los proyectos.

Además, todos nuestros clientes pasan por el filtro de un abogado y un ingeniero. De esa manera, conseguimos la comunión entre la parte técnica y la legal. Es por ello que en las reuniones con los clientes somos capaces de prever problemas técnicos que pueden aparecer y dar ya la cobertura legal necesaria para evitar sorpresas a posteriori. Podemos evitar problemas de ejecución de la tecnología a la vez que ya le damos la capa jurídica necesaria para su evolución, todo ello minimizando riesgos.

No solo asesoramos a startups aunque sea el núcleo principal de la firma. Trabajamos con empresas en punto de escalabilidad y con corporaciones globales.

Carlos M. Lizán. CEO de INLEA Legal.

¿Estáis centrados en algún nicho específico o ayudáis a toda clase de startups?

Somos una boutique tecnológica y en ese sentido la tecnología está presente en todos los sectores de la economía. Tenemos muchas empresas de health-tech, food-tech, prop-tech, e-commerce, cine, música, sport-tech y educación entre otras.

¿Por qué es importante para una startup dar el salto a Estados Unidos?

Aunque en España hay más inversión disponible de la que nunca ha habido, una vez que las startups se convierten en scale-ups y, por tanto, están listas para internacionalizarse, Estados Unidos es sin duda el escaparate mundial por excelencia.

Teniendo en cuenta que el objetivo de una startup es ser vendida, sabemos por experiencia que abrirse mercado en Estados Unidos otorga más probabilidades de ser vista por los potenciales compradores.

En ese sentido, diseñamos hojas de ruta a medida para cada startup para su desembarco en EEUU.

Ponemos toda nuestra experiencia encima de la mesa para modificar aquello que sea necesario para crear un caso de éxito.


Carlos M. Lizán. CEO de INLEA Legal.

¿Trabajáis también en otros países?

Sí. Tenemos socios con capacidad de ejercer el derecho en diferentes jurisdicciones, así como colaboradores en otras jurisdicciones con los que trabajamos a diario. De hecho, Inlea tiene sede en ocho países actualmente, e INLEA LEGAL se nutre de todos colaboradores que tenemos en esas sedes.

¿Qué tiene que tener una startup para seduciros y que sepáis que puede tener un éxito global?

Inlea, y por ende INLEA LEGAL, se basa en un concepto propio que hemos desarrollado llamado la “pirámide inlea” que nos permite analizar proyecto a proyecto sus puntos fuertes y sus puntos débiles para ver si las startups están listas para tener éxito, pero por encima de todo están el equipo y la tecnología. Ponemos toda nuestra experiencia encima de la mesa para modificar aquello que sea necesario para crear un caso de éxito.

¿Trabajáis también con grandes corporaciones que quieran innovar en sus productos o procesos?

Sí. No solo asesoramos a startups aunque sea el núcleo principal de la firma. Tenemos a empresas en punto de escalabilidad y a corporaciones globales a las que prestamos servicios de forma recurrente.

Las startups viven un momento dulce a nivel político. Varios CEOs han sido elegidos para acompañar al Presidente Sánchez en su viaje a Estados Unidos, se ha aprobado una nueva ley de startups… ¿Se acompaña esta mejor imagen del emprendedor de facilidades para emprender o en otros países la situación es más sencilla?

La situación en otros países es mucho más sencilla. La burocracia en España es un poco más tediosa que en otros países, no solo para emprender sino también para recibir financiación extranjera.

El nuevo borrador de ley parece que quiere atacar ciertos puntos para dar visibilidad y ayudar a las startups, pero hasta que no tengamos la redacción final de la ley, de momento parece que hay más grises que claros. Hay que agradecer el esfuerzo del ejecutivo para apoyar la emprendeduría, y esperamos que no se quede a medio camino.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *